"nadie nace sabiendo / que morir también es ley de vida"
puntualidad . exactitud cósmica .
sincronía . todo eso le falta a este puto mundo . o quizás no . será que del
lado de tu cama el sol se posa sobre los monoblocks y todo de repente se
transforma en la vista de un hotel en Bangkok . se escucha cantar a los niños,
el bambú huele a pausa temporal, la lluvia perfora el techo de tu habitación .
y te reís . por no llorar . o peor . por no poder llorar . el eco se copia a tu
chiste y es un loop notablemente contagioso . y lo escucho por las noches, de
este lado de la cama . el lado más frío . donde la calle de noche no me ofrece
toda la luz que se tragó del día . París queda en París... o en mis recuerdos .
sutileza le falta a este mundo . eso es . maneras amables de sabotearme los
meses que cuentan en el calendario pero no entre mis huesos . cachetazos
certeros para esa noche y una decisión tomada . la peor calma para la peor de
mis tormentas . será que el mundo es todo tuyo si querés y yo me quedo
boqueando con los pulmones arrugados en las manos, como quien desmenuza un
paquete de garrapiñadas . el último paquete del mundo . porque no puedo más
inflar este momento que se está pinchando a sí mismo . porque es querer tapar
el sol con un dedo . porque es reconocer la necedad, la derrota, la verdad .
porque es pintar la pared de tu espalda con nombres de flores o peces que no
conocés, pero se ven lindos . porque es duplicar el ladrido en la casa . porque
es inundarte con el olor que da sonrisas, que da fiaca, que da hambre . porque
es desesperarte para no pensar en los agujeros que está dejando este fundido a
negro . es como hacer malabares con granadas . es calcular los ángulos de un
círculo . es la inglesa frecuencia del 93 . es rendirse a lo mezquino de una
tarde en la que podés simular que todo está bien pero al que despedís no es a
mí, sino a tus muertos que vinieron por la merienda . la ciudad se hace de goma
en cada viaje, en cada canción, en cada ventanilla de colectivo . la ciudad se
hace ancha y honda . se hace peligrosa . se dinamitan algunos barrios . minas
explosivas en ese bar, en esa esquina . lluvia constante en esa parada, en esa
pizzería . vientos huracanados en el empedrado de San Telmo un domingo por la
tarde . en el temblor de la cancha de Boca . y yo no puedo más . si salgo a la
vida, salgo a la muerte . caminar este mapa me va a costar la salud o algún que
otro diente . boxeo con imágenes que se desenfocan de a poco . desprendo de mí
una bandada de pájaros negros . me obligo a extirpar nuestro Simon de ritmos
corporales, mi timing perfecto para decir en lo que estás pensando, nuestra
camaradería a la hora de la cama . de mi ombligo, un cormorán con mis ojos,
comiéndome las tripas . zarpa de mí un barco con tu nombre, llevándose el
metraje de piel que me queda . los huesos que arrastro sin melodía . las ciudades
que guardarán los viajes que no hicimos . zarpa de mí, lento y cansado . y
repito . no puedo más . tu cara se refleja en las vidrieras . en las canciones
de un tal Matthews . en el corcho de mi pieza, con un corazón anónimo dibujado
por tu mano . juro que nunca pensé que mi cuerpo guardaría tanta agua . nunca
pensé que desandar todo este paso, sería tomar el cuchillo por la hoja . pero
ahora, por capricho, quiero detenerme en ese momento . obnubilados, los dos, en ese momento . iluminados por el sol y la ola polar . caminando por Florencia,
diciendo casi al unísono que nos quedaríamos unos días más o de ser necesario,
toda la vida. quiero mudar mis cosas a ese momento . en el que el sol se
ocultaba lento mientras una cantante mala hacía covers sin sentido . en
Florencia, la hermosa . en la sonrisa inmensa que nos provocaba ver los gelatos
multicolores . la cerveza a pies del ponte . el amor estallando en todas las
calles finitas y tan europeas . no quiero, no puedo, no debo . no merece el
músculo de mis ganas desgarrarse con una foto única, mal revelada en el
laboratorio . no merece una historia contarse con tropiezos o impulsos en
ayunas . que la enchastren otros nombres, otros holocaustos . si suelto la mano
de tu sueño, sé que va a caminar por sí solo . sé que va a agujerear los pitucones,
arruinar el dobladillo . sé que en algún momento, va a volver a mí . como todo
. como un boomerang de buenas decisiones en el momento indicado . como esa
primera decisión que me hizo hacer pie entre tus días . como ese chapuzón en el
Luna y el aluvión que nos llevó puestos . eternizo en mi garganta el ronquido
que espera volver a ser soundtrack . dejo en pausa mi panza que tanto se paseo
por los espejos . dejo bajo mi manga, un día en el que sin querer, por falta de
puntualidad, exactitud cósmica y sincronía de este mundo, nos volveremos a
cruzar en otro bondi . pero más enteros . llenos de sol y cosas que nos
hicieron bien . llenos de moretones merecidos . de viaje para adentro .
resultó ser que le di Genioles a
mi corazón y era tuyo el dolor de cabeza . resultó ser que nos pensaba como uno
solo y ahora te vas por un rato . para volver a empezar . con otro envión, otra
fuerza . con el reset de la mochila listo . con el pañuelo sobrecargado de ríos
a los que les diste mi nombre .
yo voy a seguir acá . en este barrio dando batalla al mundo.
yo voy a seguir acá . muriendo y
escribiendo, cada día un poco.
6 comentarios:
me pongo triste al pensar en celebrar el regreso del baterista que eswcribe.
porque estas palabras son puñaladas en el alma de cualquiera. por más lejos, por más afuera que uno esté de las cosas.
hoy me acurruco en esta tristeza llena de ternura, intentando una sonrisa frente a la genialidad de un texto terriblemente desolador...
me duele un estómago que no es mío pero mientras te leo habita en mi cuerpo.
Estoy sorprendida por la belleza de tu tristeza.
Muy bueno.
Wow George! hace cuanto no te visitaba. cuanta fuerza acá.
gracias chicas por sus comentarios y por ponerse la camiseta
un beso grande :)
algo así ibas a decir. podés contarlo con tu voz, con tu letra, y aunque es personalísimo, se puede visitarlo y sentirlo familiar. ojalá se haya ido un poco de tristeza cuando lo escribiste.
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