la procesión va por dentro
tu propia ciudad se acomoda según los sismos
de las cagadas que acumulan tus años
la decadencia, la malacostumbre, el engaño
malambos eternos en boca de otros
tantos verbos viejos
usados, pasados, prestados
revividos en la película diaria
de una mujer que espera una cachetada
por parte del mundo
o de alguien que tenga la mano lista
picante y efectiva
cada cual tiene los planos de su propio infierno
conoce lo que duele, lo que arde
los rincones donde el dedito del pie relincha
zafarrancho hecho y derecho
por donde se filtran los mundos
las palabras
todo aquello que no se dice
pero se piensa, tanto se piensa
y la boca del cordero
aquel que muerde la lengua del lobo
saca a pasear los quilombitos que van a parar
al fondo del cajón o debajo de la alfombra
- según el peso -
hasta que algo les dé fuerza
suficiencia para vivir y hacer morir lo cotidiano
y así tus piernas se van a dormir
entrelazadas y calladas
perdiendo la circulación
ganando kilómetros en algún país del norte
lejos de lo construido y ganado
en tierras pampas, jugando de local
donde la niñez y los recuerdos
se baten a duelo por ganar lugar en la repisa de fotos
y es que la procesión va por dentro
detrás de los dientes inmaculados
junto al loop de la mentira
enterrando en la llanura una montaña
enterrando en mi calvicie tus cabellos
jugando a que no sabemos nada de nada
como siempre, como ahora
porque en los sueños están nuestros miedos
porque allí está la cara de esa mujer
que espera chirlos en vez de bombones
porque allí somos uno con el mundo que no nos deja respirar
y cuando tu cara caiga junto con tu vestido
recién ahí sabré que no queda más por incendiar
que no valdrá la pena buscar respuestas en el fuego
ni en las camas deshechas de aquellos barrios fuleros
desandando pasos que no hemos dado
ocultos en la brisa matutina
(piromancia o piromanía, según el caso)
será entonces cuando decore las paredes
te daré la bienvenida
y planearemos un escape al infinito, juntos
allí donde el tiempo ni los viejos rostros cuentan
donde la soledad es mi boca mordiendo mi codo
5 comentarios:
y si, tenías que decir, y decirlo de este modo.... cada cual tiene los planos de su propio infierno, pero conoce mejor los de su único cielo.
y sabe hacerlos vibrar, gastarlos hasta renacer, un renacimiento cálido y necesario, como la palabra que se escapa cuando parece que no hay más nada que decir.
qué lindo que vuelvas, es lindo siempre que lo hacés!
siempre es bueno volver
y leer tanta potencia
Pero que fuertee! siempre que paso encuentro y me entretengo entres sus lineas y pocos puntos.
me gusta mucho sus letras!
you got me at "dedicatorias y pajas", pero lo que vino después fue hasta mejor. me quedo cerca.
qué bueno acordarse de algo que quedó lejano en el tiempo-espacio.
y que siga ahí.
y tan genial
un gusto leerte, como siempre!
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