martes, 10 de diciembre de 2013

identikit





"qué iluso que fui sólo por amarte
creí que podía ser tu dueño así..."







son las 3 de la mañana . lo sé por tu sonrisa borrosa y por mi cuerpo que no logra desatarse de la costumbre de tu cama . son las 3 de la mañana y esta sábana usada, caminada y bombardeada, me va a marcar la espalda con una suerte de geografía inexacta, mapa del mundo nocturno donde van a morir los sueños y la piel . siempre hago lo mismo . siempre repito el itinerario, copio a mano alzada tu cintura, reconozco el error, lo borro con el codo, desafino la nota más alta . siempre sé lo que viene después . un silencio ciego, tus brazos rodeando tus rodillas, mi lento caminar entre toda esta sombra y el bañito . la canilla gotea . desde que te conozco, gotea . va a seguir así porque nadie la arregla . va a seguir así porque no soy tu hombre, ni el hombre de esta casa . sólo soy un cuervo que supo anidar en tu ventana en tu peor momento . sólo soy un refugio de noches fuleras y palabras tontas . un turista del desastre y el bardo hermoso que supone ser tu vida . son las 3 de la mañana y pitas un cigarrito . en bolas, tiritando y achinando los ojos, disfrutando del tabaco que te da un puntapié en la sangre . la luz del baño es fría, fluorescente y se pegotea entre las costillas . me miro al espejo y digo en voz baja que es la última vez que me subo a un tacho con vos . los dos doblados de birra y tangos que no sabemos bailar . de la jeta y corriendo por la calle como animales desaforados, porque cayeron dos gotas y ya flasheamos que se viene un diluvio . digo en voz baja que es la última vez que vengo hasta este monoambiente con balcón francés, sobre una avenida que es la olla del peligro céntrico, en un barrio de guapos, inconscientes y puras mexicaneadas . tengo un partido de rugby de elefantes drogados loopeando en el bocho . enfoco la vista y sobre el mentón encuentro el cadáver de un raspón . y ahí nomás, la memoria acciona su maravilloso mecanismo de péndulos y engranajes, de nombres de minas random, de noches enfrascadas sin rotular . recuerdos estrechos y empedrados, de andar sinuoso y desconfiado . recuerdos que se inflan como globos en este bañito de 2x2 en pleno barrio de Monserrat . la gárgara larga del botón del baño tapa el ruido que hace mi panza, un poco por hambre, otro poco por angustia . más allá del azulejo suena un bandoneón quejoso y desolador, apertura propicia para el tanguito más triste de Los Piojos . y la melancolía es un cuchillo inoportuno e invisible, que se clava donde más duele y donde menos se deja ver . y esta melancolía es lerda para el puntinazo en la canilla, para la sal sobre la herida, para el llamado sin pensar a tu número que todavía guardo con un dejo de esperanza . me acuerdo de la noche en que te conocí, borracha, en una terraza por Palermo, hablabas con unos franceses en un resbaladizo inglés mitad francés desvergonzado . te vi y no pude creer, pese a mi duelo, mi saliva empantanada y mis moretones, que me parecieras tan radiante y luminosa en una noche tan cerrada y perdida como esa . tu boca bailaba al ritmo de la trabada y confusa conversación y hablabas de Montmartre y Sacré Cœur como quien dice de memoria las preposiciones . a-ante-bajo-cabe-con-contra-de-desde-en-entre-hacia-hasta-para-por-según-sin-so-sobre-tras-mediante y durante... durante 2 minutos estuve colgado mirándote, leyéndote el cuerpo, aprendiendo la curva de tu sonrisa, adivinando tus dolores . durante 2 minutos, que en esa cámara lenta de alcohol y curvas cerradas simbolizaron 30 minutos de una de mis noches más inverosímiles y maravillosas . creo que estabas descalza, y si así no fue, mi cabeza y el amor me jugaron una linda pasada . tenías un vestidito, como un campo de lavanda floreciendo en el cuerpo, no adiviné corpiño porque breteles no vi . supe en ese instante que, acto seguido, iba a entrar en tu vida, que iba a decir algo idiota, que ibas a captar la intención y te iba a parecer tierno, que esos franceses iban a desaparecer, que toda esta terraza entera iba a desaparecer junto con el mundo y todo el dolor acumulado, que íbamos a estar flotando en un asteroide de borracheras y sábados, que ya nada más iba a importar porque tus ojos se iban a confundir con los míos y si bien no sería amor inmediato, bien podría ser una suerte de hechizo, hipnosis o el deseo incontrolable de querer abrazarte y sentir que todo iba a estar bien para siempre . tuve una epifanía: tu nombre, la cama, el bostezo compartido . te reías y no sabías bien por qué . te reías y por eso fue la pausa de este mundo siempre tan a los pedos . gesticulabas y los franceses iban pegados a tu boca como moscas en un parabrisas . interrumpí, de manera torpe, con un vaso de birra en la mano . hice una pausa eterna con el dedo apuntando hacia el cenit mientras el nadir se me cagaba de risa . hablé de lo maravillosa que nos pareció esa ciudad, de sus barcitos perdidos, de las calles y su gente . de cómo nos cagamos de frío una tarde en la torre Eiffel, de la infección en mi ojo, del Louvre y la emoción en Notre Dame . hablé en un plural que me dejó en offside y mientras los franceses me miraban en perpetuo silencio, vos entendiste que ese pifie era totalmente sincero y de alguna manera, inevitable . y ahí fue que te parecí tierno y el resto es historia: el apocalipsis de la terraza, tu campo de lavanda inundando mi ropa, los dos chapando en un taxi desesperados por llegar al monoambiente del barrio de Monserrat . esa noche, nuestra primera noche, dejé pegada atrás del espejo de tu botiquín una lista, escrita con letra apurada y extasiada, de cómo las cosas que siempre planeas y proyectas llegan, pero a veces en formas inesperadas y no por ello dejan de ser geniales . el identikit rezaba caprichos y detalles de una mina que nunca iba a conocer, imposible, pero tenía que ser lo suficientemente fuerte el impacto para quebrarme la guardia y cagarme todos los planes . ahí estaba la gracia.





y se hicieron las 3 de la mañana . la atmósfera congelaba los fantasmas de viejos cuerpos que supieron caminar y hacer crujir el piso de madera de este monoambiente . vos en la cama, pitando, sonriéndole a la luna que entraba por la ventana, envuelta en humo y jazmines que decoraban tu mesita de luz . en el baño, el suelo frío, mi cara en pausa sobre el espejo, la mueca del miedo y la velocidad . con los meses aprendimos a saltar baldosas flojas, a rascarnos la barriga, a llenar el tiempo de películas y arrumacos sobre una cama que se transformó en capital de todas nuestras tardes, con o sin sol . con los meses aprendí a recordar en singular, a sonreírle a las viejas fotos, aprendí al pie de la letra eso de que para tener hay que soltar . vos te llenaste de algunas sombras y mensajes de ex novios que preguntaban por vos y por tus cosas . te acribillaron la puerta de tu casa, te pusieron en cuarentena el corazón . pudiste salir airosa, te pusiste el equipo al hombro y saliste jugando, con la cancha en la cabeza . te abracé en cada caída, en cada golpe a la paz de este departamento, en cada resbalón sobre la cama, en cada tropiezo por la alfombra levantada . arreglé el cuerito de esa bendita canilla y me raspé el mentón con el borde de la cama mientras buscaba tu animal mitológico una tarde en la que te bañabas y canturreabas una vieja chanson de Gainsbourg . me hablaste de Abelardo Castillo y de cómo te sentías unida por algún hilo extraño e invisible a La Sirenita . ahí entendí, por primera vez, que esto podía ser amor posta y algo más que un par de meses jugando a ver quién disparaba primero . te gustaba jugar con tu pelo y hacer lentos movimientos con las manos sobre mi cabeza, como interpretando melodías complejas que sólo vos escuchabas . murmurabas bien bajito, casi imperceptible, mientras tus manos dibujaban una órbita alrededor mío . el gato te escuchaba siempre atento, vos le hablabas al oído y el muy guacho iba corriendo al baño sobre sus piedritas . te hacía caso, yo te hacía caso, todo en este mundo te hacía caso .


son las 3.30 de la mañana . toco con un dedo el viejo raspón del mentón, la cicatriz . pasaron meses de esa noche en la que caímos en un remolino de cosas nuevas, de perfumes, de rutinas, de palabras inventadas . me miro en el espejo y no sé por qué carajo pienso que no voy a hacer más locuras a tu lado, que digo que es la última vez, que prometo no repetir errores, ¿quién soy yo para sentenciar semejante boludez? me miro en el espejo y veo a otro tipo, el que supe ser, abatido por el dolor de otra persona, enrollado por un mambo ajeno y tan injusto . la canilla ya no gotea . no gotea porque la reparó el hombre de tu casa . no te escucho pitar en silencio, el gato no maúlla . la casa está enmudecida, atrapada por los gritos que se escuchan a lo lejos en la calle . no estás sobre la cama, los jazmines no están en la mesita, el balcón francés no me devuelve la imagen de esa avenida apenas transitada del barrio de Monserrat . este monoambiente ya no es el tuyo, es mi casa, en Villa Ortuzar: un retrato de Riquelme dibujado a mano colgando en la pared, unos discos de los Redondos en el suelo, El que tiene sed sobre la mesa de luz y de nuevo, el quejoso y melancólico cantar del bandoneón de ese tanguito piojoso, atravesando las paredes acartonadas de este monoambiente sobre Avenida Triunvirato.


abro el botiquín y encuentro aquella vieja lista, el identikit de lo imposible, de la utopía que da marcha al viejo motor de los sueños . todos los puntos tachados, menos uno:


“Ya voy a conseguir un Hipogrifo que viva bajo mi cama. Vas a ver…”




jueves, 19 de septiembre de 2013

afónico



tics de la revolución..










llueve adentro, en la cabeza . explota la tormenta en el oído, muy fuerte y feroz . ruido de chapas que cantan y el agua que muere en círculos sobre una boca de tormenta . afuera el sol, con vos . afuera ese capricho de Le Corbusier caminando torpemente por la calle Florida . porque Florida es para caminarla torpemente, paseando y perdiendo el tiempo . muriendo de a poco, desde los ojos hacia adentro . ese adentro, donde hoy llueve y se mojan los planes.


quizás no estés ahí . ni cerca, ni por asomo, ni por casualidad . elijo que tengas tiempo y ganas de ver vidrieras, mientras escribo en el aire estas palabras que quizás te alivien la cara o te roben un resfrío que te haga faltar a la oficina . esta cachetada te va a salvar de saberlo todo . la ignorancia a veces es buena, necesaria . tengo planos desprolijos, trazados con una Rotring 0.2 . sé que no van a darme pistas para construir, pero sí para escapar . porque te vi desnuda, atada de pies y manos.. pero ya no me importas . lo que realmente importa ahora, es que en otro lado del mapa, quizás en Madagascar o Varanasi, hay una única conexión disparando ceros y unos, tratando de entender todo este despelote . a vos te esperé sentado en la calle, fumando un pucho apagado porque no fumo, hablando solo, contando personas que pasan . a vos te esperé desde el silencio y agazapado . afónico de amor y de minutos en el reloj . y no me importó decirte cosas con el cuerpo, balas con la cabeza, rabonas con un baile de cortejo y desparejo . no me importó nada de eso, porque lo que importa ahora es otra cosa . es esa puerta entreabierta a 1 mes de mi cumpleaños, a 1 mes de cosas que no festejamos más . es esa trampa para osos señalada con neón . es ese pibito que se esconde detrás de la cortina y se le ven los pies . son las trampas del sueño, los días y los significados que no encuentro en ningún lado.


sos una alarma que suena de lejos, repetida en la madrugada . como la luz de los autos, que copan de a momentos mi habitación . si querés, estás . aunque sea para joderme el clima y los rounds . no busco repetirte, calcarte los contornos, loopear tus detalles sobre una piel en blanco y nueva . no busco “el bueno”, la revancha, la cura de la malasangre . ya no busco en cuadernos viejos los diálogos que nos dieron pie, las promesas que no pudimos cumplir . ya estoy lejos del rico guacho que te rascaba la espalda y jugaba con la punta de tu pelo . ya estoy lejos y de pie . salpicando temblores, apostando hasta la guita que no tengo . me como el mundo, tu barrio, tu calle, tu departamento ya vacío . me hago renglones de un escrito que habla de perfumes que la memoria no olvida y que la vida se preocupa en no recuperar . me hago incendio constante del momento en que extrañas y puteas bajito, sentada en un inodoro que sólo Dios sabe cuándo fue lavado por última vez . y si lloras, es porque llueve en mi cabeza . el agua será cliché, pero no es estúpida.


haceme el favor y despedite de una puta vez de esta ciudad . haceme el favor y corta el cordón, corta los lazos, cortame la cara con el filo de la puerta . haceme el favor y no vuelvas a los lugares de los que nunca te fuiste .  agarra tus cosas, tu polvareda, tu reflejo en la ventanilla, tus papelitos sueltos y andate . hacete humo en un buen asado, en el alma de una molleja . hacete olvido entre las arrugas de la jeta de un punga que orbita por San Telmo, cagado de frío y en patas . no es necesaria tanta parafernalia, tanta psicodelia, tanta orquesta progresiva . no es necesario tanto epílogo, tanto fondo blanco, tanta tos atragantada por tragedias .


hoy no tengo paraguas, pero tengo certezas . tengo nombres encerrados en sobrecitos . tengo faros antiniebla, airbag y aspirinas . tengo en la cabeza una jugada maestra, tengo el 10 en la espalda, tengo en el puño apretado el dolor que hoy se me caga de risa . ni vos, ni ella, ni nadie . tan sólo la luz, para saber que es de día cuando la noche se apaga .


y afuera el sol, con la que viene. 
siempre.

martes, 18 de junio de 2013

la posibilidad de la palabra "leones"




un posible poema
de un posible amor
ante la posibilidad
de la palabra "leones"







yo no sé, Jazmín, 
qué es lo que logrará por fin atarnos
si tu universo desnudo y dilatado
o la forma en que tu lengua
se arquea ante la posibilidad 
de la palabra "leones"

leones al pie de la nada
leones bajo mi cama
leones sobre la mano de Borges
que escribe el tiempo 
en el tiempo

leones 
como amores solitarios
afilando las garras 
contra el sofá
mientras espero 
que llegues a casa
después de un largo día de trabajo
levitando sobre tu sonrisa
siempre presente
siempre constante
que adivino desde la calle
mientras escribo en el teclado
y deletreo el deseo
de que digas, suavemente
"no hay más birra, voy al chino"

y el amor, ahí,
acuchillado sobre mi abdomen
sangrando un cardumen carmín
de pájaros y flores
que cantan la coincidencia
del eco que resuena
entre tus ojos
y los míos

pasa que 
todavía creo en la magia
en la ficción de la cabeza
en la poesía cotidiana
en los goles de un Riquelme
obnubilado e inspirado
de emboquillada al arquero

porque sé que hay belleza
en cada decisión que tomamos
en los encuentros y desencuentros
en toda esta secuencia
que se pega sobre la lente
esperando 
que al fin 
decidas y me digas
que dormir conmigo
puede ser genial
o inevitablemente trágico
porque te invento una costumbre
que va a arruinar tu rutina
porque los rugidos en la cama
por fin van a saltar de los sueños


Jazmín,
yo sé que estoy colgado
del costado más oscuro
de tu reloj siempre atrasado
que soy esa buena noticia
que alguien te está por dar
que en tu fila
vengo atrás de Antonioni y Cobain
y antes de un futuro mal novio
del que vas a escribir hasta vaciarte
y al que siempre vas a volver
para repetir 
la sangre en la rodilla
el llanto de madrugada
la mentira nocturna
sobre el lienzo apagado
de la pantalla de un celular

yo te elijo 
por tu impronta
por tu estilo
por tu discurso definido
porque tenes planes claros
proyectos como edificios
que se levantan sobre la ciudad
que en tu película es un bosque
porque sabés lo que querés
-cómo y cuándo lo querés-
porque tu nombre
se transforma en un jardín
cuando en mi boca se expande
sencillo e indeleble



ojalá me encuentres
antes de que sea tarde
que estas letras 
disparadas en la luz
sean el trailer de esa película
que nunca vamos a olvidar

una vez dijiste 
que querías 
"expander la experiencia 
del tiempo real.."
pero sé 
que en realidad
quisiste decir "expandir"


te lo perdono
porque a vos se te perdona todo

incluso esos leones
que me muerden los tobillos
al levantarme cada mañana
que me envuelven con su aliento
de melancolía y tatuajes



lunes, 13 de mayo de 2013

¡EXTRA! ¡EXTRA!


Durante este mes, tuve la suerte de que me publiquen en 2 revistas. Les comparto la info:




Revista EL GLOBO LITERARIO

Se consigue gratis en:
. La Casa del Árbol. Fitz Roy 2483, Palermo.
. Club Cultural Matienzo. Tte. Benjamín Matienzo 2424, Palermo.
. Casa (sic). Av. Rivadavia al 8000, Floresta.
. Besares Club de Cultura. Besares 1840, Núñez
. Áurea, Galería Patio del Liceo. Av. Santa Fe 2729, Recoleta



***



Revista CANÍCULA

Puntos de venta:
.Mu, Punto de Encuentro - Hipólito Yrigoyen 1440 - Lunes a Viernes 9-21 hs.
.Punto de Encuentro de Revistas Culturales - Corrientes 3307 - Lunes a Sábados 13-20 hs.
.Crack-up Libros - Costa Rica 4767 - Todos los días 10-21 hs. (también domingos y feriados)
.Orsai Bar - Humberto Primo 471 - Jueves a Sábados a partir de las 20 hs.
.Cobra Libros - Aranguren 150 - Lunes a Sábados 14-20 hs., Domingos 16-20 hs.




ilustración: Magdalena Uncal Basso 
para el txt "no tengo nada que explicarle a nadie"

martes, 23 de abril de 2013

El Darwinismo ha vencido











- ¿hola?
- ¿me podés explicar qué carajo es eso de “Ulay y Marina”?
- …hola, sí, todo bien che, ¿vos qué onda?
- bueno, perdón. HOLA, ¿todo bien? ¿estás ocupado?
- si, estoy en la calle.. es el 3er día consecutivo que me llamas..
- bueno, sí.. ¿me contestas?
- ¿qué carajo te tengo que contestar? ¿desde cuándo te importa lo que escribo? estás entrando mucho a mi blog parece..
- ¡qué chabón! afloja un poco con la melanco..
- ¿¡perdón!?
- eso, Pola.. ya fue. sos un chabón copado, inteligente. y vos ahí como un gil, sosteniendo la vela..
- ¿¿qué vela ni qué vela??  ¿y quién te dijo que estoy escribiendo sobre ella?
- dale, boludo.. es tan obvio.
- vos estás enojada porque nunca te escribí nada.. ahhh.. ¡es eso!.. estás celosa.
- jajajajajjaaj..qué tarado que sos, lo digo porque………………………





ayer fue eso . hasta ahí.
hoy estoy en una cama, con olor a sábanas de hospital . gotea el suero que es el segundero de este tiempo empantanado . de este tiempo perdido, sin hacer nada . el ventilador se mueve lento y tambalea . parece que lo muevo con los ojos . se inyecta un poco de modorra en esta postal tragicómica, donde el blanco es el más oscuro de los colores para vestir.


urgente, al Pirovano . un boludo sin casco y hablando por celular mientras anda en bici . Olazábal y Ciudad de la Paz, bocacalle marcada en rojo . un tachero que me lleva puesto y me revolea 2 metros más allá de mis huesos . voló bici, celular, dignidad, todo . contusión y politraumatismos para coleccionar . la saqué barata . nada grave, no hay huesos rotos, pero estoy en observación por el golpe en la cabeza . y la boluda ésta que me llama con preguntas incoherentes y cuestionando por qué escribo lo que escribo . ¿qué carajo te importa lo que escribo? . vos fuiste un chiste que me acuerdo de memoria y que conté mal a propósito . te duele el huesito dulce del orgullo, nena . te duele que mi muñeca haya tropezado tu nombre y en tu lugar, aparezca otro corazón, con más historias que contar . yo escribo lo que quiero, de la forma que quiero . porque extraño su voz quebradiza y su tonada de provincia . sus uñas de rojo en los pies . la curva de su empeine . sus puchos en soledad, en la cocina . extraño su perfume en mi ropa . las palabras que inventamos . su débil memoria para recordar algunos nombres . porque me extraño a mí con ella . envuelto en su pelo, que era una trampa para osos . entonces no necesito que me cuestiones, que me digas qué recordar y cómo hacerlo . mis recuerdos son míos . mi cabeza elige imaginar un huracán en el medio de esta calle para no aceptar lo sencillo de una cachetada . para no aceptar lo tonto que me veo tirado sobre el empedrado, llorando sus huecos, no mis imprudencias . todo impoluto, ingrávido e insolente . se renueva el aire entre las costillas . me acuerdo de a poco de tu nombre y de la mano viene la silbatina . suena un disco triste que me afloja las manos . y me doy cuenta de que estoy separando la ausencia de las faltas . sobre esta mesa, junto a la comida de hospital, puedo distinguir lo que duele de lo que pincha . lo que quema de lo que arde . puedo distinguir mi cara en el reflejo de la sopa, inconsistente y derecha . congelada en una mueca que se traduce en un adiós constante y para siempre .


tus preguntas quedan pululando en el aire . se prenden a las cortinas, como polillas confundidas . siento el calor de los analgésicos haciendo el trabajo en mi sangre . siento su cabeza estallando más allá del océano . un martes de lluvia bajo un cielo ajeno, desolador e inevitable . ip’s de Rusia con amor saturando el servidor . su viento helado llega por correo en una seguidilla de números que seguramente debería jugar al Quini . es imposible cortar el enlace, la soga que nos ata al muellecito . es imposible tapar el mar con una pelopincho que llenó a las apuradas . el calor seguirá entrando por su ventana . seguirá trayendo visiones a la hora de la fiebre . seguirá enfriando sus recuerdos que cuelgan de la pared de su pieza . la que tiene por ahora, la que le toca . yo siempre voy a ser esa camisa que arruga cuando el sueño la aprieta contra el colchón . ese chocolate masticado, perdurando en la heladera . ese par de zapatos que ya le queda chico pero no quiere tirar ni regalar . y te lo digo a vos, postrado en esta neblina de agujas y gasas, no voy a dejar que me olviden . me niego a ser esa fórmula matemática para determinar límites . me niego a ser esa capital de país independizado en los noventa . voy a ser esa baldosa floja en tu día de lluvia . para que me putees durante todo el día, para que me comentes en el ascensor, para que la mancha te manche el humor . aunque sea a los tiros y empalagada de furia, vas a masticar bajito mi nombre . vas a escribir y borrar cientos de veces un mismo mensaje . vas a morder la almohada, contener la congoja .  anudar todo el llanto a la punta de una pashmina que sirvió de carilina . vas a inundarte por dentro cuando suene una canción, cuando un aroma te teletransporte a una mañana de domingo, paja y fútbol . porque olvidar es morir . y morir, es la moneda que tenemos todos pero nadie quiere usar.


cambié el café de mis mañanas por un té saborizado y en hebras . ablandé mi pecho a cariños de otras vidas que no me viene bien revivir . ahora te veo sentada al lado de la cama . jugando al sudoku . vos odias el sudoku, pero más odias hacer tiempo . seguramente tu odio es duplicado en este momento . ya no sé si sos la del llamado o la que salta en mis renglones . ya no sé si te quiero abrazar para sentirme aferrado a alguien en esta vida o si en realidad con saber que estás acá, ya me alcanza . soy fan de lo que recuerdo y cuento . soy fan de alguien que ya no está, ni estará . el Darwinismo ha vencido, hemos mutado, evolucionado, repuesto engranajes . hemos aprendido, cambiado y crecido . de entre los escombros, he sabido rescatar las fotos y relicarios . todo a los cajones de mi memoria, perfectamente almidonado . no hace falta que digas nada . tu voz es como una melodía del ayer, perfectamente reproducida en mi silencio . y así no hay reverberancia . no hay tropezones masocas . no hay palabras que decir cuando ya entendimos todo . te necesito cerca . lo más cerca que puedas . te necesito picándome el ojo, con tu destreza quirúrgica . te quiero desprevenida cuando de nuevo me suene el celular . calcada escena y situación . esquina de Olazábal y Ciudad de la Paz:



- ¿hola?
- ¿me podes explicar qué carajo es eso de “Ulay y Marina”?
- es algo que escribí para no sentirme solo.. es algo que escribí, para que algún día me llames.












Vivian Maier



miércoles, 13 de marzo de 2013

The lovers








Marina & Ulay




mi casa en cuarentena . el frío tragando un viejo disco de Phil y lo que queda de vos, amontonado en los rincones, copando el desapego . no me atrevo a abrir un cajón más . no me atrevo a seguir sepultando estos años en la esquina de un barrio que ya no será mío a partir de mañana . tengo nuevos soles en nuevas camas viejas que romperán mi espalda y los sueños que debo renovar . tengo nuevos dolores esperando lejos de mis razones que nadie entiende ni ve . levanto el corazón y la tropa resfriada . levanto el ego para no pedir perdón . te odio sin motivos, sin guerras, sin balaceras que nos den heridos para contar . te odio en lo más profundo de la cama . cuando no estás . cuando alguien muy distinto a vos se quiere pasar de listo . cuando alguien con tus mañas, me da mañanas que son noches para olvidar . si supieras cuánto crecí desde que te fuiste . sumé color en mi piel, viejos deseos atragantados . sumé rock a mi corazón tan bossa nova . sumé los días vacíos a una montaña bajo la cama . sumé un amor de cabotaje con el que ya me saqué las ganas . sumé y sumé . por miedo a restar . por miedo a decir que la libertad no era lo que esperaba . por miedo a decir que ahora sí la voy a pasar mal . me muero de miedo, de risa, de frío . me muero de miedo y bien lejos . no pienso pedir ayuda . esta boca sólo sirve para ladrar . 

no voy a hablar ahora . no tengo ganas . podría quebrar el fino vidrio que te envuelve . romper esa esfera que te mantiene con vida en este mundo tan hostil y desubicado . pero no . no quiero arrepentirme por tanta distorsión . son ropas viejas las que me abrazan y están mojadas . prefiero dejarte en pausa, plantearte mil preguntas, darle cuerda a tu corazón en cuentagotas . no voy a matarte . voy a dejar que el tiempo lo haga . que me veas irrepetible en cada esquina, en cada bondi, en cada noche, junto a tu cama, junto a tus pies . preguntando si me amas . preguntando si me amas más que a nadie . voy a lograr que camines durante 3 meses, hasta que me des el abrazo último y final sobre la gran muralla china . para que el desgaste no sea sólo físico, sino también emocional . para que no llores al verme . para que no se te nublen los ojos en esta última mirada . comeme con tu celeste. desgarrame la carne en tus pupilas enormes . volveme inmortal . escribime, recordame, amame en silencio bajo los ojos de otra . yo voy a estar acá . masticando estas decisiones mal tomadas . llorando por las noches, reviviendo en las mañanas . recordando tu cara en cada calle que fue nuestra . rogándole al invierno que no se haga largo, que no empeore este calor que me falta . jugando a que soy fuerte . jugando a que no me acuerdo tu nombre cuando la noche me trepa la cama . 

espero callar todas tus dudas . responderte algún mail desde un aeropuerto vacío y de madrugada . wi-fi robado y café en vasitos de plástico . la felicidad tiene estas caras . ojos llenos de lagañas y largos viajes . llenos de habitaciones superpobladas y candaditos de freeshop . en mi espalda llevo mi casa . en mi espalda llevo la bruma del barrio que no me abandona . los problemas enterrados . la lluvia incesante . ojalá me olvides en el próximo corazón, porque algún día te va a matar toda esta espera. 




* * *





Ulay & Marina




y de repente, voy confundido entre la gente . me pierdo en Plaza Francia, orbitando nuestras tardes . cruzando campo minado, de maniquíes con ropa cara . y de repente me siento en Berlín, cruzando la avenida interminable con el bobo en la mano . suena lo último y más triste del nuevo Bowie . me prometo no llover como esta ciudad y su alemana perfección . me prometo no entregarme a la melancolía obligada de una canción que nos escribe . Berlín siempre será fría y gris . hermosa . hit del bajón . configurada hasta el hartazgo por perfectos y rubios arquitectos . ojalá nuestro amor haya sido así, como la Bauhaus: una promesa, una escuela, una forma de vida . me acuerdo de este camino . los pies no lo olvidan . "¿dónde estamos ahora?" canta Bowie . tengo la respuesta entre los dientes . vos allá, yo acá . lejos lejísimo . unidos tan solo por la misma luna que ilumina . unidos por las diferencias y los distintos husos horarios . no quiero saber de vos . con quién estás, dónde estás, a quién le hablas mal de mí, a quién le mentís sobre mí . yo lo he perdido todo, menos la memoria . yo tengo recuerdos que todavía respiran . son míos . esos adoquines, ese barrio, esos dolores, esas batallas, esas victorias, esos bares, esas noches, esta plaza, este mundo . yo lo viví, no me robé ninguna foto . podría quedar boqueando al borde de la orilla . pero no, ya no . me aprendí el movimiento de las mareas . ya hice la sobremesa de mis tragedias . ya me corté, sangré, cicatricé.

ni cabos sueltos, ni gol de oro . estoy jugando solo . caen los disfraces, el carnaval se acabó . ahora sé qué charcos no quiero volver a pisar . me siento en tu mesa por un único minuto . en silencio . no me esperas . y tus ojos se llenan de lágrimas al verme ahí sentado .  sé lo que sentís . sé que lo sentís . ya no tengo preguntas, problemas por resolver . te ocupaste de responder en la boca de la que no sos, ni fuiste, ni vas a ser . el minuto se dilata, se hace un año que son dos . pasa la vida en cámara lenta . se te quiebra el alma ante la sorpresa . tomas mis manos y una última duda me ataca . mientras tus ojos se diluyen en lágrimas que limpian tu cansancio y tu tristeza.



...y este otoño, ¿dónde te vas a enamorar?










Marina & Ulay - 1988



lunes, 7 de enero de 2013

violeta fin del mundo










“mañana es el fin del mundo”
reza el titular, la noticia, la boca de una vieja que charla en la parada del bondi con otra . un Maya se quedó dormido sobre la piedra en la que tallaba un calendario, eso es lo que pasa . un Maya encontró algo mejor que hacer antes de darle vida eterna al mundo y sus malambos . escribir años por venir no es el pasatiempo ideal de nadie . ni del más hijo de puta de los aburridos . mucho menos de los poetas, amigos de lo efímero e instantáneo . esos tipos que no pueden trabajar el tiempo y su densidad, que necesitan disparar municiones gruesas en el lapso que dura la eyaculación: un año de mar en el sol.


así lo expresa el titular del diario que estoy leyendo . mañana las noticias serán olvido, fuego y olvido de nuevo . mañana seremos una historia tonta que no se le podrá contar a nadie . y eso es lo triste, no perdurar . el café se enfría en mi boca que remueve al viento y sus aristas. se amotinan en la lengua tus calambres, el déjà vu de un beso final y el contorno del cordón de la esquina de Pueyrredon y Las Heras . allí, donde un hombre llora . allí, donde se empaña el vidrio del 93, el último que tomo . y parece ayer, esta suma de meses que sólo me restan . la puta, ¿cómo contar todo esto con un cristal ajeno y desnudo? . pero tiene que ser ya, que mañana se acaba el mundo . urgente y sin mapas, prendido fuego en pleno julio . tiene que ser ya . el inicio del descenso, la agonía del descuento .  ahí me veo, soy un manojo de huesos desordenados y grises . me decís muchas cosas que no entiendo . me estás pateando la cara delante de todos . me estás pidiendo que me vaya . que así es mejor, que así lo decidiste . ahí me veo, estafado . me aferro a tu cuerpo como si de eso dependiera la vida y este futuro trunco . le dieron de atrás en los tobillos y nadie vio nada . qué injusticia carajo, qué injusta la vida cuando se le canta el pito . y no sólo el tropiezo de un tren que viene dándole máquina al corazón, es el tropiezo del amor que conquisté desde la nada . y allí nos quedamos petrificados y en silencio . somos una foto que no me quiero olvidar . impermeable e infinita, sin fecha de vencimiento en mis ojos . que explote todo a la mierda, por favor . el día final arrancó temprano para mi y nadie me avisó . no llegué a ponerme los pantalones, ni cepillarme los dientes . las lagañas ganaron mis ojos, el sueño aún no voló . que no te agarre el fin del mundo, tu mundo, en pelotas . que no te sorprenda en cualquiera . que no te pase.


“mañana es el fin del mundo”
me dice una nena que tironea de mi camisa, pidiendo una moneda . cara de pícara, llena de mocos . me pregunta por qué estoy triste . “no estoy triste, linda.. es la cara que me sale desde hace unos meses, no tengo otra” . y ella se rasca la cabeza y pierde su atención en un reflejo del sol en la ventana . creo que desde hace meses hablo solo . a oscuras, en silencio, en sueños o no . como un loco de mierda . estoy murmurando un haiku de dolor en repeat . aburrido . vengo piloteando la tormenta como puedo . es la verdad . o parte de la verdad . la otra se la cuento a mi analista, que afila mis pensamientos que cortan sandías como si de manteca se tratara . la cuestión es que el fuego crece en mí . la combustión es real  y quemo, todo lo que toco lo quemo . y así es como los pastizales de esta historia arden al lado de la ruta . el humo inunda tu mirada perdida que se la cree saber todas . cuánta guitarra . te duele el bobo y no te permitís llorar, extrañar, desdecir, aliviar . te duele el bobo y construir un castillo es lo que mejor te sale . los días traen lluvia y el fin del invierno . crudo frío polar, impenetrable . no voy a dejar que quiebres mis labios y desafines mi garganta . tengo historias que contar . hablar del clima y de todo lo que pude lograr desde que el ruido se apoderó de la noche de esta ciudad . sé que ya no camino ciertos barrios por pudor o puros recuerdos . sé que no necesito más de 2 ruedas para mover mi nombre y mis sueños . sé que no necesito cascaritas en las rodillas para saberme vivo y golpeado, como todos tus amigos nuevos . no necesito nada de eso . tan sólo un vientre donde hundir mi cara . esta cara de tristeza y humo de cigarrillo . de desvelo y chicle masticado . un vientre que apague las voces, tus voces, gritando en el teléfono que nunca sonó y se guardan en mensajes que no quiero escuchar . “¿Hola? ¿me escuchas? Toma nota: hice un ranking de las cosas que nunca más voy a volver a ver” y luego el tono como un latido ininterrumpido, marcando muerte . ya sé cómo es esto . tu casa, ahora mi casa por unas horas . tu cama, ahora mi cama por unas horas . los besos, los arrumacos . una canción de fondo que entretiene a los vecinos . ese ascensor que hace el mismo ruido que todos los ascensores de mi vida y de esta historia . el mismo prólogo para cuentos diferentes . el toqueteo inocente . la calentura . la memoria de los dedos y el cuerpo . y el olor . el olor allí como un animal hambriento, agazapado, esperando atacar en el momento peor . todo se reduce a eso . al mal movimiento de mis peones, a mis alfiles que juego como caballos, al nueve que mando al arco, a tu cara rebotando en otra cara cuando los nombres son otros . y juro que doy guerra y amor . por igual,  a quien lo pida . juro que soy un asesino de los movimientos que sabíamos a coro . juro que trato de disimular la herida, de no copiarme en el espejo . de no acoplarme a una mañana, donde amanecer es parecido a suicidarse . juro que quiero estar en carrera antes de que a mis ganas se las trague otra tragedia .


y por eso estuve allí . hablando en presente en medio de todo este pasado . y ahora por eso estoy acá, en esta silla, mirando cómo esa pareja se mata los sueños en medio del mismo bar . somos nosotros . en otro mes, en otros cuerpos, en otros daños, en otro pequeño souvenir del miedo y del espanto . somos nosotros . mi diario no miente, lo que va a decir la boca tampoco . la decisión ya está tomada, la erupción fue por cesárea, no hay marcha atrás para los cobardes . estallan las bombas, el cielo se tiñe de un violeta extraño . violeta fin del mundo . la gente en el bar vuela en el aire, la niña de los mocos llora en un silencio desgarrador . todos buscan refugio bajo las mesas . todos buscan refugio en alguien más . la mano que aprieta tu mano que aprieta el tiempo que aprietan las palabras que aprietan mis pantalones . todo lo que te quise decir, está en mi corazón . te lo llevaste . es un mensaje en una botella sellada para siempre . un código de barras en un futuro sin láser . y por fin, sin tanto artificio ni reverencia, el fin del mundo llega . acaba de ocurrir . fue este estornudo en cámara lenta . lo acabo de ver, 2 mesas más acá . visión periférica . perfecta . el fin del mundo llegó . para esa pareja, llegó . por primera vez puedo ver desde afuera el huracán que arrasó con mi casa . ahora puedo entender de dónde viene el dolor . ahora puedo entender por qué de esta manera escribo este raspón largo y conciso . recién ahora puedo ver mi cara, en el momento de mi muerte.


y repito,
ahora sé de dónde viene tanto dolor.