viernes, 12 de noviembre de 2010

tanto y mucho













tus cruces
tus bosques incendiados
tu rímel de lluvia
tu pelo practicando un corazón
tus días perdidos
todo tu empedrado
tu cuerpo imitando el hueco de un ascensor
tu batalla de papel mojado
tu himno en soledad
tus jueves un jueves
tus recompensas nunca pagas
tu aliento matinal
tu árbol, un ciprés..


tanto y mucho
repartido, malherido
cantando al derecho, canciones mareadas
los pasos mal hechos, los techos mal techos
todo el cielo tragando y revolviendo
una casa que te hice entre mis cosas,
para que sepas que nunca tenes que volver
de dónde nunca te fuiste
y si algún día,
tenemos el placer de darnos algo más que atención y buena faena,
tengamos presente este presente que hoy toca la puerta
que llama por tu nombre,
desenfunda y dispara,
después limpia el enchastre,
pide perdón..


no hay tiempo para pensar
en las carreras inconclusas
para pintarte la puerta
de un color parecido al de mi cama
no hay engaño, truco,
ilusión soberbiamente montada,
sujeta con hilos imperceptibles a los ojos
no hay doble discurso,
palabras cruzadas,
atentado terrorista en la puerta de tu casa
no tengo tiempo para perder,
perdiéndolo en cosas que no seas vos
no tengo ese tiempo
bien ganado
mal perdido


tanto y mucho
en esta bolsa que arrojas al mar
que abandonas por vez primera
como un mensaje a tu futuro,
a tus buenas decisiones,
a tus mejores augurios
una bolsa que se aleja,
que se hace corriente y dicha,
movimiento y lucidez
una bolsa que se aleja,
junto con el enorme barco de tu soledad


ya no tenemos que preguntarnos por lo que no está
porque hasta su partida ha sido hermosa
así con todo
incluso el miedo, perfecto







jueves, 4 de noviembre de 2010

los vencimientos








vos no sabés lo que es

sentarse en la cama

barajar la penitencia

perder el pelo, las ganas, la vergüenza

correr sentado todos esos días



vos no tenés idea lo que es

tener la mano muda

este gran motor en pausa

acumulando años quietos

miedos privados

tener la certeza de una chica en la esquina de mi casa

esperando por mí

por lo que queda de mí

gritando mi nombre

poniendo al descubierto

el mapa de los días en los que fui otro

un soñador

un pelotudo

un vanguardista de mis cosas

un manojo inseguro de buenas intensiones

una bomba al dente

enfriándose por dentro



vos no sabés lo que es

darle charla a la cabeza

cabalgar río abajo

entre adoquines tuyos

que no me pertenecen

imaginar una secuencia

que nos ponga pateando para el mismo lado

parir las buenas nuevas

para contar a mis amigos

los colores de tus uñas

combinando ánimo y tristezas

vos nunca vas a saber

todo lo que perdí

lo que escribí y no ventilé

todas las noches oliendo la muerte

en cada gesto que te copiaban

por conciencia

o por error


no tuviste mejor idea

que jugar a la tempestad

de revolvernos un rato

repensarnos

rejodernos

de ver todos los restos

que la vida no termina por perder



elegir un corazón

hacerlo nuestra casa

decorarlo

darle vida

darle penas por vaciar

porque vos nunca vas a saber

de verdaderos dolores

hasta que me decida a golpearte

en el codo de tu tiempo

como un señor

de guantes blancos

con mucha clase

cometela

sin chistar


porque jugaste limpio y despacio

y hoy tu gruñido es un boomerang

un tiro rengo

una canción que no te podes despegar

como esa noche contando

mil camiones del CEAMSE

como esa noche jugando con fuego

el fuego reptando, comiendo, matando

haciéndote creer que seríamos eternos

un estornudo de chances

unas semanas sin problemas

más que la vida misma


y no

vos nunca vas a saber

todo esto

qué tan hondo

qué tan cierto

nunca vas a saber

por qué maté de un tiro a mis pasos

dónde ahogué tantos nombres

en qué esquinas me despedí para siempre

si bailo malambos

si beso despacio

si brillan mis noches


si pienso en vos

como cuando era un pobre tipo

esperando una buena paliza..



quizás es hora de que sepas

de que llevamos climas distintos

colecciones discontinuas

incontables horas en el bolsillo

para gastar en los ojos

de alguien más..